Nación: El manoseao de la Corte y la media sanción que se está por perder.

Sobre la última “negociación salarial”.

Vamos por el aumento y la ley de Paritarias

¿Se puede seguir tolerando que en la “negociación salarial” la Corte retenga un aumento que debió darse en septiembre hasta entrado el mes noviembre? ¿Reconocerán acaso el retroactivo a septiembre?

Este indignante problema, es mucho más profundo de lo que parece y va mucho más allá de esta última negociación.

Lo que la Corte y la UEJN llaman “negociación salarial” no es tal, pues la Corte hace lo que quiere. ¿Está bien que los aumentos salgan unilateralmente por acordada y no por acuerdo entre partes? ¿Está bien que los aumentos sean en cuotas y no de una sola vez a comienzo de año para hacer frente mejor a la inflación?

La Corte se aprovecha deslealmente de no tener un marco regulatorio para discutir en paritarias. A la “renovada” Suprema Corte no le salta ningún `purito´ por este anacrónico desconocimiento social e institucional con los judiciales.

La ley de paritarias y el lobbye de la `corpo´ judicial.
En 2009, justo antes del recambio parlamentario desfavorable para el gobierno, se votó por unanimidad en Diputados la media sanción de ley marco de paritarias. Fue en medio de las disputas entre el gobierno y el otrora “partido de los jueces”..

Al día de hoy mucha agua pasó bajo el puente. Por ejemplo, la `corpo judicial´ y el Gobierno finalmente llegaron a un entendimiento, que entre muchas cosas incluía el cajoneo en Senadores de la ley. Por su parte, la cúpula de la CGT se encuentra en una profunda crisis con el gobierno.

El lobbye de la `corpo judicial´ tuvo una eficacia total pues sumó al oficialismo y también el apoyo (inclaudicable y apasionado) de la oposición derechista.

Si a tooodo esto, le sumamos que la dirección UEJN también tiene un `entendimiento´ con el Gobierno, nos da como resultado que en un mes se pierde el estado parlamentario de la Ley Marco.

Seamos claros, Piumato dejó de lado la ley de paritarias, el 82% móvil para todos e importantísimas reivindicaciones, a la expectativa de obtener un cargo parlamentario en el kirchnerismo. Pero la jugada no salió como se pensaba. La CGT quedó prácticamente fuera de las listas oficiales.

Piumato se quedó sin el pan y, por ahora, nos dejó a los judiciales sin la torta.

Es necesaria una UEJN independiente del gobierno y de la Corte, que promueva la lucha y la democracia sindical. Discutamos este balance y reagrupémonos para transformar al sindicato sobre nuevas bases.